jueves, 23 de mayo de 2013

EL MAPALE
 
El mapalé es un género musical y bailable propio de la region caribe colombiana. Esta tonada conserva características musicales típicamente africanas. Representa el encuentro erótico entre el hombre y la mujer.
Es un baile afrocolombiano el Mapale surgió en la costa del Caribe colombiana gracias a la influencia cultural de los esclavos africanos traficados durante la conquista de América. El conjunto o ensamble musical consta de tambor alegre, tambor llamador, guache o maracas y tambora. El mapalé ha sido descrito también como "ritmo del frenesi" y se ha hablado con no menos abundancia de argumentos, de una especie de "brujería" que logra que los bailarines se vayan sintiendo atraídos por algo inexplicable que parece salir de los golpes del tambor o el agudo sonido de una caña, hasta hacerlos caer literalmente hablando, en un desenfreno de pasión, de deseo carnal. Esa es una coreografía muy representada.
A QUI LES MUESTRO UN PEQUEÑO VIDEO DE COMO SE BAILA MAPALE....


Danza y creatividad dentro de la Expresión Corporal
La danza es una de las formas de arte y de expresión más antiguas de la humanidad, diversificada y ramificada en numerosas variantes. Hay autores que resaltan las posibilidades de esta manifestación expresiva en la comunicación no verbal, estableciendo un paralelismo directo entre danza y EC (Willen, 1985 y Robinson, 1992).
 

 

DEMOSLE EL ULTIMO ADIOS A SONIA OSORIO LA QUE FUE Y SERA SIEMPRE SINONIMO DE LA DANZA.

Dejó esta vida tras 12 días de convalecencia en la clínica Medihelp, de Cartagena.


Sufría de complicaciones renales y bronquiales. El pasado 25 de marzo cumplió 83 años.

En Colombia, el nombre de Sonia Osorio es sinónimo de danza. Y es que esta bogotana dedicó su cuerpo al baile desde que tenía 3 años. Si bien había nacido en Bogotá, la coreógrafa pasó la mayoría de su infancia en Barranquilla, ciudad a la que dedicó gran parte de su repertorio artístico.
Toda la magia del Carnaval de 'Curramba' quedó inmortalizada en los numerosos montajes que creó Osorio y que se han presentado en diferentes ciudades del mundo. "Que se criara en esa ciudad fue como una semilla que creció en tierra fértil", dijo su hijo Rodrigo Obregón.

Osorio, que falleció ayer lunes en la Clínica Medihelp, de Cartagena, por causa de problemas renales y respiratorios, estudió ballet y danza moderna en Estados Unidos y Europa y se dedicó especialmente a la coreografía.

Además, se desempeñó en el periodismo y fue diseñadora, pero toda su existencia se la dedicó al ballet, pues el arte corría por sus venas, ya que su padre, Luis Enrique Osorio, fue uno de los dramaturgos más reconocidos del país. Fue tataranieta del primer alcalde de Bogotá, Alejandro Osorio Uribe, y estuvo casada con el pintor Alejandro Obregón, con quien tuvo dos hijos, Rodrigo y Silvana. De otras relaciones nacieron tres hijos más: Kenneth y Bonnie Blue Siffkin, y Giovanni Lanzoni.

La coreógrafa, que nació el 25 de marzo de 1928, fundó el Ballet de Colombia en 1960 y, desde sus comienzos, mezcló las técnicas modernas del ballet con las raíces de la cultura colombiana.

Este colectivo y su directora se presentaron en más de 20 países, como Israel, China, Japón, Alemania, Rumania y Rusia, entre otros. Su dedicación a este grupo artístico le mereció numerosos reconocimientos, como el de mayo del año pasado, cuando el entonces presidente Álvaro Uribe Vélez le entregó la Cruz de Boyacá, por los 50 años de su vida dedicados a difundir la cultura colombiana en el mundo.

"Mientras en el país ha habido desunión, ella ha unido. Mientras en el país ha habido violencia, ella ha traído regocijo y paz. Mientras en el país ha habido tantas dificultades, ella ha traído para los colombianos talento", recalcó Uribe en la ceremonia.

Como todos los grandes artistas, Osorio empezó a transgredir los límites de su disciplina para llamar la atención de su público. Por ejemplo, a los 14 años, antes de salir al escenario para presentar una rutina de danza, cortó su largo vestido mientras el presentador la anunciaba. "Estaba loca por mostrar las piernas. Salí, y la gente aplaudía", recordaba la artista.
Otro de los episodios con los que causó conmoción fue en 1969, cuando, en el Club Campestre de Girardot (Cundinamarca), se atrevió a realizar un topless en uno de sus espectáculos, sin importar las conservadoras reglas de la sociedad de aquella época.

Esa misma sensualidad y desparpajo se los transmitió a su ballet, del que por cinco décadas estuvo pendiente de cada uno de sus detalles, como la escenografía, los bailarines y el vestuario.

Todos los ritmos autóctonos del país quedaron inmortalizados en los espectáculos que presentaba, pasando por la cumbia, el currulao y el joropo, llegando al pasillo y al sanjuanero.

Su cuerpo llegará hoy a Bogotá, donde se le hará un homenaje en la sede del Ballet de Colombia, por parte de sus bailarines. Mañana se realizarán sus honras fúnebres en la Catedral Primada.